Es curioso el estimulante efecto que causa en nuestra percepción ver como en una pieza de arte se combinan tradición y actualidad con un resultado en el que, increíblemente, pueden convivir dos conceptos que, de entrada, podían parecer irreconciliables.
La dinastía Ming fue una de las más importantes en la historia de China porque, durante su régimen el país prosperó mucho y el arte, la literatura, la poesía o el teatro florecieron; uno de los legados más importantes de este periodo fue la fantástica porcelana.
Basándose en el folclore y la historia de su país, el escultor, fotógrafo, pintor y videoartista Lei Xue, juega con la tradición pasada y la modernidad en la mayoría de su obra y ejemplo de ello, son estas esculturas de latas abolladas de porcelana que componen «Drinking Tea».
De porcelana blanca y con un diseño de motivos pintados en azul, las piezas están inspiradas en los productos que se crearon durante la dinastía Ming pero dando un toque contemporáneo a la cerámica tradicional.
Según la Gallery Martina Deterrerque, «la necesidad humana de beber se manifiesta tanto en la forma externa de las latas como en su diseño […] hay similitudes entre nuestro consumo de bebidas enlatadas y la toma de té durante la dinastía Ming, y esas similitudes son la rapidez con la que tomamos la bebida y la indiferencia que nos causan los recipientes»-
Todo el concepto, que gira en torno a la combinación de pasado y presente, también está reflejado en la propia elaboración artesanal que hay detras de cada figura; al contrario que las latas, estas joyas de porcelana no se fabican en cadena, son piezas exclusivas elaboradas a mano que dejan constancia que casi cualquier mezcla es posible si se hace con el arte y el gusto que tiene, por ejemplo, Lei Xue.
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