Muere el director ruso Gennadi Rozhdéstvenski

0

Una de las más importantes batutas de Rusia, ha fallecido en Moscú a los 87 años

El director de orquesta Gennadi Rozhdéstvenski ha muerto este sábado a los , según ha anunciado el teatro Bolsohi de Moscú, donde trabajó al principio de este siglo. «El Bolshoi está de duelo», ha anunciado la institución a través de su cuenta de Twitter

Nacido en 1931, Rozhdéstvenski era uno de las más importantes batutas de Rusia. También pianista y compositor dirigió numerosas orquestas tanto en su país como fuera de él, durante más de medio siglo. Valery Gergiev dijo de él que «ayudó en gran manera a promover la obra de Sergei Prokofiev»

Hijo de músicos, cambió su apellido paterno (Anósov) por el materno Rozhdéstvenski para su carrera profesional. Su padre ejercía como profesor de dirección en el Conservatorio de Moscú mientras que la madre trabajaba como cantante en el Teatro Bolshoi. Su primera formación musical la recibió en el Instituto Gnessin de Música para poco después pasar al Conservatorio de Moscú y estudiar piano y dirección bajo la tutela de Lev Oborin y de su propio padre.

A los veinte años, Rozhdéstvenski debutó como director en el Bolshoi por medio del ballet «Cascanueces», de Chaikovski, y poco después conquistó los galardones de dirección orquestal en los Festivales de Juventud de Bucarest, Berlín y Varsovia, adquiriendo reputación en la URSS como una de las más firmes promesas de la dirección orquestal. Entre 1951 y 1961, Rozhdéstvenski ejerció como director en el Teatro Bolshoi asistiendo al maestro Yuri Fayer. Dirigió una de las primeras interpretaciones de la «Sinfonía nº10» de Shostakovich en 1955 al sustituir por enfermedad a Samuel Samosud.

Rozhdéstvenski se presentó al año siguiente en Inglaterra al frente de la compañía del Bolshoi. Cuatro años después, en 1959, dirigió el estreno de la ópera «Guerra y Paz», de Prokofiev, en el Bolshoi. A partir de la década de los años sesenta, Rozhdéstvenski se convirtió en una de las mayores figuras musicales de la URSS, al ser nombrado director titular de la Orquesta Sinfónica de la Radio de Moscú en 1961, en la que permaneció hasta 1974, y alternar esa labor con la dirección musical del Teatro Bolshoi desde 1964 hasta 1970. Ese mismo año, Rozhdestvenski debutó en el Covent Garden con el «Boris Godunov» de Mussorgski. En 1972, fue el fundador y primer director de la Ópera de Cámara de Moscú y empezó a dirigir con frecuencia como invitado en el extranjero.​

En 1974, Rozhdéstvenski sucedió a Antal Dorati al frente de la Orquesta Filarmónica de Estocolmo y se convirtió en el primer director soviético que, sin abandonar su residencia en la URSS, dirigía una orquesta occidental. En 1978 fue designado director de la Orquesta Sinfónica de la BBC de Londres hasta 1981. En 1981 se puso al frente de la Orquesta Sinfónica de Viena por un período de dos temporadas. Durante esta época, Rozhdéstvenski también ejercía de docente de dirección orquestal en el Conservatorio de Moscú, en la Academia de Música de Viena y, a partir de 1987, en la Accademia Chigiana de Siena.

Rozhdéstvenski regresó de nuevo de forma definitiva a Rusia en 1982 para hacerse cargo de la recién creada Orquesta Sinfónica del Ministerio de Cultura de la URSS, formación con la que realizó una extensa labor discográfica. Ya en 1991, Rozhdestvenski volvió a ser nombrado titular de la Orquesta Filarmónica de Estocolmo en sustitución de Paavo Berglund durante cuatro temporadas. En 2000, Rozhdestvenski también volvió a asumir funciones directivas en el Bolshoi.

Interesado en la música contemporánea, estrenó numerosas obras de compositores soviéticos, entre otras, «El sol de los incas» (1964) de Edison Denísov, y también tocó por primera vez en Rusia obras de autores extranjeros, como «El Sueño de una noche de verano» de Benjamin Britten. Asimismo, muchas composiciones están dedicadas a él, como la sinfonía de Sofia Gubaidulina «Stimmen… Verstummen…»

Ver más en: ABC

Leave A Reply