15 Cosas raras que hacen los amantes de los libros

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Aunque los lectores de libros cada vez somos más, en algunas ocasiones seguimos pareciendo ‘bichos raros’. Estas son algunas cosas que hacemos relacionadas con la lectura y que resultan extrañas para otros.

Los libros, cuando se convierten en una afición que despierta miles de pasiones, hacen que tengamos actitudes, que ante los ojos de los demás, pueden parecer muy extrañas e incluso extravagantes.

Pero es que con los libros las relaciones van más allá del amor por las buenas historias y ha trascendido incluso a un cariño especial por lo que son como objetos de aprecio estético.

Por eso hemos recogido estas 15 actitudes que los lectores tenemos frente a los libros y que no tienen que ver solamente con pasar noches en vela absortos con las aventuras de nuestros personajes favoritos y que para muchos pueden ser las cosas más raras.

  1. No saber qué hacer cuando terminas de leer un buen libro.
  2. Tener una clara obsesión con leer los libros antes de ver las películas o cualquier otro tipo de adaptación. 
  3. Oler los libros que acabas de comprar, a penas quitas el papel de envoltura.
  4. Oler los libros viejos, esos que llevan años guardados en las repisas de tu biblioteca personal.
  5. Tocar las páginas de un libro recién abierto, porque la textura y la sensación son inexplicables.
  6. Llevar un libro siempre en el bolso, en la maleta y por qué no, en el bolsillo.
  7. Llorar en público mientras lees, sin importarte que la gente a tu alrededor te vea como un ‘bicho raro’.
  8. Reírte en voz alta cuando lees, sin darte cuenta que la gente se queda mirándote.
  9. Comprar libros nuevos, aunque en la casa tengas 20 mil.
  10. Lo que hace que nunca salgas de una librería con las manos vacías.
  11. Tener miedo de prestar tus libros y que no regresen a ti.
  12. Caminar mientras lees o leer mientras caminas.
  13. Olvidarte de comer y dormir por estar leyendo.
  14. Usar como separador de páginas cualquier cosa que tengas a la mano. Porque los separadores son las cosas que más se pierden.
  15. Leer en posiciones extrañas.

Al final no importa cuántas cosas extrañas hagamos para leer, no importa si para otros somos extraños, lo importante es que cada vez tengamos la posibilidad de leer más y leer lo que cada uno quiera. 

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