Hoy hemos tenido un sueño fantástico en el que ocurría algo increíble, todos los lugares y los escombros teñidos del dolor, las pérdidas y la tristeza que conllevaban las guerras vividas, morían y renacían reconvertidos en arte.
Quizás no haya sido un simple sueño, quizás sea una realidad que empieza a tomar forma.
Esta realidad se ha materializado en Francia, donde una base submarina construida durante la Segunda Guerra Mundial, ha adquirido una nueva vida como centro de arte contemporáneo gracias a Culturespaces.
Ubicado en Bourdeaux, el enorme búnker se usó varios años durante el conflicto, para albergar flotas submarinas tanto alemanas como italianas; ahora, pasará a llamarse Bassins de Lumières y será el centro de arte digital más grande del mundo.
El espacio subterráneo cuenta con más de 13.000 metros cuadrados y pretende estar lleno de exposiciones inmersivas en las que se muestre el arte y las obras de artistas contemporáneos como Ouchhh y artistas que son parte de la historia como el increíble Gustav Klimt.
El equipo de Culturespaces es experto en este tipo de transformaciones e instalaciones y, ya lo demostró con «Atelier des Lumières» en una antigua fundición de hierro en París.
En esta ocasión, el trabajo ha sido mucho más laborioso porque la estructura de la base submarina necesitó una revisión a fondo para asegurarse de que el nuevo espectáculo se desarrollaba sin imprevistos.
«Bassins de Lumières» abrirás sus puertas en abril del 2020 y, desde ese momento, los visitantes podrán explorar las instalaciones principales que se han ubicado alrededor de cuatro grandes cuencas parcialmente llenas de agua.
Además, los espectadores podrán disfrutar del espacio por senderos elevados que los llevarán a sumergirse en el arte que brotará de las paredes o se reflejará en el agua; habrá una exposición a largo plazo que hará la retrospectiva de un artista importante de la historia del arte y otra a corto plazo dedicada al trabajo de un artista más contemporáneo.
Para la inauguración, están programados Klint y Paul Klee y, además, habrá un espacio llamado «Le Cube», dedicado al arte digital contemporáneo que se estrenará con el trabajo del estudio digital Ouchhh y su «Ocean Data», una instalación que usa IA para crear imágenes únicas.
Ojalá pudiéramos borrar, algún día, todas las huellas de las guerras con arte.
