El Ballet Nacional de Cuba (BNC), fundado y dirigido por la legendaria bailarina Alicia Alonso, fue declarado Patrimonio Cultural de la Nación por ser «máxima expresión de la escuela cubana de ballet», informó hoy la compañía, que cumple este año siete décadas desde su fundación.
La declaración, firmada por el ministro de Cultura de la isla, Abel Prieto, reconoce la labor del colectivo, «que ha logrado una fisonomía propia donde se funde la tradición de la danza teatral con los rasgos esenciales de la Cultura Nacional».
El documento oficial también menciona a Alonso, aún activa a sus 97 años, como «una de las personalidades más relevantes en la historia de la danza y el ballet clásico» en Cuba y el mundo.
La condición de Patrimonio Cultural se extiende al repertorio de la compañía, su archivo de imágenes, los objetos y papelería relacionados con la institución y a su directora, conocida en la isla como la «prima ballerina assoluta».
A partir de este momento la preservación de estos bienes queda a cargo del estatal Consejo Nacional de Patrimonio Cultural, que además será responsable de conservar las colecciones ubicadas en las sedes del Museo de la Danza y el Gran Teatro de La Habana «Alicia Alonso».
El Ballet Nacional de Cuba debutó el 28 de octubre de 1948 bajo el nombre de su directora.
En su fundación participaron Alicia Alonso, su entonces esposo Fernando Alonso y su cuñado Alberto Alonso, ambos nombres imprescindibles de la danza cubana.
Alicia Alonso, figura cumbre del ballet, ha desarrollado una de las trayectorias más exitosas y diversas en esta disciplina, donde ha combinado la interpretación, el magisterio, la coreografía y la dirección del BNC.
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