Con una charla sobre la militancia del lenguaje, con la palabra y las opiniones de Ana Ojeda, Eugenia Almeida y Carlos Schilling, cierra esta tarde la segunda edición del Filba en La Cumbre. Las actividades de la tercera jornada tuvieron como sede El Paraíso, la casa museo de Manuel Mujica Lainez en esa localidad cordobesa.
Por la mañana allí hubo una «visita desguiada» a cargo del poeta y performer Esteban Feune de Colombi y una pequeña troupe de actores. Y luego, la típica lectura 1 a 1: un escritor lee un fragmento de un texto casi al oído de un asistente en una ceremonia íntima y apasionante. Para esta noche está programada la performance Elipsis 77 cm, de Tálata Rodríguez, en el cine y el encuentro Escritores a la carta, en el bar Vuelve la vida.
El festival comenzó el jueves 21 con un laboratorio de narrativas expandidas, una microconferencia de Ojeda sobre lenguaje inclusivo y lecturas compartidas.
«Anoche, las lecturas de poesía se hicieron en el muy típico bar La Esperanza, con más de 100 personas abarrotando el espacio y gente que se quedó afuera. La patrulla de la policía daba vueltas preguntándose qué estaría pasando. Los poetas felices, subrayando sobre todo la posibilidad de leer ante tanta gente que no pertenece al circuito habitual, o sea, realmente abriendo públicos lectores nuevos», contó Gabriela Adamo, directora del Filba, desde La Cumbre, «La conversación de Yvonne Bordelois con el escritor y periodista cordobés Carlos Schilling, en el comedor del Gran Hotel La Cumbre, fue bellísima, con toda la sabiduría y profundidad de esta mujer fuera de serie, que a sus 80 y pico de años es más actual que muchos de nosotros».
