Aniara: sobre el hombre, el tiempo y el espacio

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Cautivos en este sarcófago inmenso seguimos surcando mares desiertos donde la noche cósmica, separada del día por una distancia infinita, cernía sobre nuestra sepultura un silencio transparente.

Aniara (canto 103)

Aniara es un poema épico.

Aniara es un ciclo poético en 103 cantos. Narra el viaje de una enorme nave espacial con 8.000 humanos a bordo que se han visto abocados a abandonar la Tierra durante una contienda nuclear. El nombre de ese gigantesco navío espacial en el que se aventuran es Aniara.

Según su hoja de ruta, Aniara debía transportar a Marte a los últimos supervivientes de un planeta Tierra devastado por una guerra nuclear, pero durante la celebración del solsticio de verano, sobre Aniara cae una lluvia de meteoritos que daña su sistema de navegación, provocando que la nave salga desplazada de su rumbo original y se encamine, a la deriva, fuera del sistema solar. Aniara y su tripulación quedan condenados a viajar, confinados, durante al menos los próximos 15.000 años, antes de llegar a las proximidades de otra estrella o quedar para siempre perdida en el espacio. («Siempre estamos en el camino hacia el infinito», canta el ingeniero jefe).

Tras informar a la tripulación de la destrucción de su planeta natal, el cerebro electrónico Mima opta por dejar de estar operativo y la goldondra Aniara queda a a su suerte vagando en el espacio sideral…

Aniara | Ed. Gallo Nero | Portada y Mapa (© Ana Isabel Perujo)

¡Atención, spoiler!

… A partir de ese momento, la obra detalla el colapso moral y físico de sus 8.000 tripulantes, conformando una alegoría sobre el viaje del hombre por la vida en medio de un “vacío espiritual” que lo consume hasta llevarlo a su propia destrucción. Por esta razón, a pesar de los mecanismos de evasión que inventan sus tripulantes, desde bailar Jitterbug hasta la entrega a orgías sexuales, el colapso físico es inminente y después de 24 años los últimos pasajeros mueren con el desconsuelo de haber perdido el paraíso que era su planeta, ahora destrozado.

Aniara es la obra más singular de cuantas escribió el premio nobel Harry Martinson. Es también uno de los poemas más extraordinarios y conmovedores de la literatura del siglo XX, un viaje existencial en el que resuenan los grandes clásicos suecos o las grandes epopeyas de la literatura universal.

Aniara ha sido publicada en castellano, con traducción de Carmen Montes Cano, por la editorial Gallo Nero

Aniara trata de todo aquello que no dominamos personalmente aunque formemos parte indisociable de ello. No importa cómo vivamos, nuestra existencia discurre en unos parámetros que, de un modo u otro, nos vienen inexorablemente definidos. Uno de esos parámetros es el biológico. Nacemos, maduramos, envejecemos y morimos. Y ese parámetro alberga él solo toda la dicha y todo el terror. Además, vivimos sujetos a las directrices que el ser humano ha creado junto con la naturaleza: sociales, políticas, religiosas y científicas. Nuestra existencia toda es una serie de tentativas de explicar el mundo dentro de esos parámetros, hasta el límite del enigma o del temor, o de acotarlo y protegernos merced a los símbolos de la introspección, las metamorfosis del instinto.

Harry Martinson, Prólogo a Aniara

Aniara es una ópera.

Una ópera experimental, en dos actos, con música de Karl-Birger Blomdahl y libreto de Erik Lindegren basada en el poema épico homónimo de Harry Martinson

La partitura de Aniara, haciendo uso de diferentes lenguajes musicales, varía desde el jazz y la música serial hasta la cinta electrónica. Mimaboren, un bajo-barítono, operador de Mima, el cerebro electrónico de la nave, y el coro concentran gran parte del protagonismo narrativo. En esencia, la ópera (como ya sucedía en el poema) trata de la relación entre individuo y grupo a través del tiempo.

Tentativas de salvarnos huyendo de pensar, idas y venidas de sueño en sueño, ese era nuestro método casi siempre

Aniara (canto 18)

Aniara es también una ópera rock.

Los ochenta nacieron destinados a ponerle punto final a un mundo que se despertaba resacoso tras noches sin freno de álbumes conceptuales y mucho rock progresivo a lo largo de gran parte de la década de los setenta.

Pero todavía los había atrevidos para lanzarse a componer alguna que otra Ópera Rock. Ketil Bjørnstad fue el iluminado dispuesto a llevar el poema de Martinson hasta cimas tan insospechadas. Con la colaboración de Lill Lindfors, Folke Bengtsson y Göran Fristorp, que pusieron las voces, publicó un doble álbum en 1983.

Estrenada sobre un escenario en noviembre de 1984, apenas unos meses después una producción televisiva a base de grabaciones de diferentes actuaciones fue emitida en la Matiné og søndagsmatiné de la NRK, la televisión pública noruega, el 31 de Marzo de 1985.

El resultado no puede ser más desconcertante. Con un ritmo inquietantemente pausado, antes que el rock, en la ópera de Bjørnstad son protagonistas un incierto vapor-wave y mucho AOR-polvero proto-Europe; breves pero intensos fragmentos lírico-corales interrumpidos por space-disco moroder style algo nostálgico de ABBA; un escaldo declamando como poseído por Robert Ashley; coreografías que deambulan cargadas de simbolismo, jazz, postureo conceptual y se diría que preñadas por el fantasma de Giorgio Aresu. Y todo ello, sin resultar pretencioso… No se puede pedir mas!!!!

Ni que decir tiene que a nosotros, Los Forgotifyers, nos fascina la propuesta de Bjørnstad

«Aniara es un canto a la erosión. Hay en sus episodios el eco de traumas como Hiroshima, ciudades enteras borradas del mapa y las imágenes insoportables de un hongo nuclear que ocupan su lugar en el recuerdo. En este espejo del siglo XX, Martinson habla también de trabajo esclavo, de persecuciones y encarcelamientos propios de los estados totalitarios, del auge de cultos y otros tipos de muletas intelectuales antes de asumir que este es un viaje “que aboca a su pueblo a la destrucción y la nada”

Jesús Rocamora

Aniara es una película (dos, siendo honestos…)

El 23 de Octubre de 1960 la Sveriges Television, más conocida por sus siglas SVT, estrenaba un telefilm de producción propia que llevaba a las pantallas de toda Suecia la ópera del binomio Blomdahl/Lindegren con dirección de Arne Arnbom. Inencontrable en cualquier formato, le rendimos homenaje en este artículo incluyendo algunas de las pocas imágenes que se pueden encontrar en internet de la producción.

Ya en 2018, y adaptando directamente el poema de Martinson, a Hugo Lilja y Pella Kagerman les sale un peliculón. Es como estar viendo una versión existencialista de «Avenue 5» o como si Bergman hubiese dirigido «Wall-E». Huelgan más comentarios salvo este aviso leído en terrorweekend: «es recomendable verla un día tranquilo ya que su ritmo pausado y las reflexiones sobre la humanidad te pueden ayudar a terminar el día pensando que los humanos somos lo único que sobra de la tierra…»

 

 

Los malos rumores recorren el espacio.
De los buenos, tenemos menos rastros, pues la bondad no pertenece a la vida de acción, su luz es la misma este año y todos los años.

Aniara (canto 20)

Una última muestra de la constante influencia de Aniara es la adaptación como novela gráfica publicada por el ilustrador noruego Knut Larsson en el año 2015, de la que podéis encontrar un poco más de información en este enlace o este book trailer

Autor: Los Forgotifyers

Leer más en: Cóctel Demente

 

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