Montevideo trae una amplia delegación de autores, con Ida Vitale como emblema. Obras y temáticas.
Montevideo, ciudad invitada de honor, será uno de los focos potentes de la próxima Feria del Libro de Buenos Aires, que se inaugura este jueves. La programación de su stand se apoya en tres ejes: Poéticas montevideanas, donde se contará con la presencia, entre otros, de figuras fundamentales como Ida Vitale, Silvia Guerra y Lalo Barrubia; Miradas contemporáneas, enfocada en la producción narrativa actual, con invitados que comprenden varias generaciones de autores como Daniel Mella, Milton Fornaro, Mercedes Estramil, Natalia Mardero, Mercedes Rosende, Ercole Lissardi y Felipe Polleri; y dos homenajes infaltables a Mario Benedetti y Mario Levrero.
Pero, ¿cómo empezar a conocer este atractivo menú cultural? Escritora, ensayista, crítica literaria, periodista cultural y traductora, Ida Vitale (Montevideo, 1923) es, antes que nada, poeta. Con 94 años, su voz se volvió una de las más importantes del Uruguay. La última de la generación del ‘45 a la que pertenecen Mario Benedetti, Carlos Maggi, Idea Vilariño y Ángel Rama, entre otros.
Vitale era profesora de literatura y ya había publicado en periódicos y revistas de circulación semanal cuando se exilió en México en 1974; en 1984 retornó a Uruguay por un breve período. Entre 1989 y 2017 vivió en Austin (Texas, EE.UU.) Compartió casi 50 años de vida con Enrique Fierro, poeta uruguayo de gran trayectoria.
Su predilección por los sonetos dejan en evidencia la búsqueda constante de perfección en las formas del lenguaje. Un rigor extremo, algo que ella emparenta con sus años como estudiante de derecho, aunque ese origen no fue en detrimento de su capacidad de experimentar.
En 2017, Vitale publicó Poesía reunida 1949-2015 (Tusquets), que compila casi la totalidad de sus poemas y que le ha valido reconocimientos a nivel internacional. Semanas atrás, fue homenajeada por la Academia Nacional de Letras de Uruguay.
Incansable a los 94, la autora está trabajando en el final de un libro que se va a publicar en México sobre los diez años de estadía en ese país. Además, reunió una serie de nuevos poemas escritos tras la muerte del poeta Fierro, en 2016.
Silvia Guerra (Maldonado, 1961) es otra escritora de larga trayectoria en el terreno de la poesía. En 2012, recibió en Uruguay el Premio Morosoli por su obra. Ha participado en la organización de encuentros como el Primer Festival Hispanoamericano de Poesía (1993) y la Primera Bienal Metropolitana de Poesía del país hermano. Entre 2009 y 2012 coeditó el sello de poesía La Flauta Mágica.
Sus libros han sido publicados mayormente en España, Argentina y Estados Unidos. Guerra reivindica la poesía como algo imprescindible, con un deber de conmover, que está en el otro extremo del entretenimiento. La poesía como “una cuerda tensa”, asegura, “puede suscitar una cantidad de cosas, pero entretenimiento y liviandad, ninguna”.
También son muy celebradas sus apariciones públicas en reportajes, en los que suele profundizar en la actualidad y problemáticas de las artes en el país oriental.
Lalo Barrubia (Montevideo, 1967) es el seudónimo bajo el que escribe María del Rosario González, poeta (siempre primero, según ella), novelista y performer. Vive en Malmö (Suecia) desde 2002, desterrada por la crisis económica que cercó a miles de uruguayos y argentinos.
Se reconoce deudora de la poesía de Fernando Cabrera y Eduardo Darnauchans; dueña de una prosa incómoda, que interpela, por momentos oscura, Barrubia representa sin duda a una generación, sobre todo montevideana, que vivió su infancia y juventud entre la dictadura y los difíciles años 80 de crisis, sexo, drogas y mucho punk, aunque sus formas son difíciles de encajar en el panorama local.
Ha recibido premios por algunos de sus trabajos, se encuentra en proceso de terminar su cuarta novela y acaba de reeditar la novela Arena (Editorial Planeta, 2003), su primogénita, con el sello Criatura Editora.
Vinculado desde muy joven a la militancia política en las filas del Partido Comunista, la mayor militancia de Milton Fornaro (Minas, 1947) ha sido siempre en la cultura. Escritor de larga trayectoria, editor, guionista, docente, dramaturgo, periodista cultural y asesor de comunicación del Ministerio de Educación y Cultura durante el gobierno de José Mujica, sus trabajos, diversos, y su vida, coinciden en un punto: el fuerte compromiso social y político.
Fundó, junto a Antonio Dabezíes, dos revistas de humor político que dejaron su marca en el Uruguay post dictadura: El dedo y Guambia, su sucesora, cuya publicación superó un breve bache entre el 2000 y 2003, años de crisis. Después, pasó a editarse como suplemento de un diario.
Fornaro defiende la ficción como entretenimiento y es un declarado entusiasta del género policial, al que reconoce como capaz de crear proximidad con el lector a través de la complicidad y la empatía. La madriguera (Alfaguara, 2016), su última novela, es un policial histórico con mucho de thriller, un trabajo sumamente complejo -por la detallada y minuciosa investigación histórica previa- y absolutamente cautivante.
La historia que cuenta Fornaro en esa obra comienza en el Palacio Durazno, en el Montevideo actual. Los medios de comunicación dan cuenta del hallazgo de restos humanos mientras se llevaba a cabo el exterminio de ratas que invadían el edificio. La novela le mereció el Premio José María Arguedas, de Casa de las Américas (Cuba, 2017).
Natalia Mardero (Montevideo, 1975) es licenciada en Comunicación Social y trabaja como redactora creativa del Centro de Fotografía de la Intendencia de Montevideo. Además, es columnista cultural, tarea que alterna con la producción literaria.
Ha escrito y publicado cuentos, poesía y una novela. Entre su producción, recibió muchos elogios el libro de cuentos Posmonauta (Editorial Latina, 2001), y su última publicación, la novela Cordón Soho (Estuario Editora, 2014).
Mardero es fanática de los cómics y las novelas gráficas, admiradora de Madonna (publica atractivos textos en el blog madonnaesmimadrina.blogspot.com.ar) y la Mujer Maravilla como referentes de una infancia marcada por las ganas de derribar estereotipos de género. Es exponente de una generación que mantiene una visión positiva respecto a la infancia y adolescencia en las décadas de los 80 y 90. En este momento se encuentra preparando su quinta publicación, de la que no dio mayores detalles, que saldría a la luz este año de la mano de la Casa Editorial Hum.
Los autores reseñados, con Carlos Liscano (Montevideo, 1949), también formarán parte en esta feria del Diálogo de escritores latinoamericanos, jornadas de reflexión sobre la literatura, sus desafíos y sus posibilidades. Finalmente, no estará en el encuentro de Buenos Aires Fernando Butazzoni, autor de más de 20 títulos. Otros autores uruguayos que enriquecerán el folclore rioplatense son Roy Berocay, Federico Ivanier y la lingüista Magdalena Coll, entre otros.
La edición número 44 de la Feria del Libro se inaugura el próximo jueves y esta vez un gran recital público (y gratuito) marcará el inicio. A partir de las 20, el cantante y compositor montevideano Jorge Drexler ofrecerá un concierto al aire libre sobre la avenida Sarmiento, frente al predio de La Rural. Es en el marco de la presentación de su nuevo disco Salvavidas de hielo. El show forma parte de La Noche de la Ciudad, por lo que también habrá programación especial en el stand preparado por el Ministerio de Cultura porteño.
Además, el próximo sábado se realizará La Noche de Montevideo, con entrada gratis desde las 20. Ese día, la Feria tendrá espectáculos de la murga Cayó la Cabra, los solistas Ana Prada y Dani Umpi y la banda de Jazz del Municipio de General San Martín, que dará un concierto en homenaje a un gran fan del jazz: Julio Cortázar. También habrá recital de Gabo Ferro.
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