El festival ACT ofrece del miércoles al sábado un total de 17 obras
El teatro está para ser mostrado, exhibido, ya que sin un público que lo vea y lo disfrute, cualquier obra carece de sentido. En este aspecto, el festival ACT lleva quince años sirviendo de plataforma para que compañías jóvenes y emergentes de los cinco continentes encuentren en Barakaldo y Bilbao una plataforma en la que mostrar su buen hacer. Así, desde el miércoles y hasta el sábado, este festival ofrecerá un total de 17 obras cortas de las que doce entrarán en concurso. Los montajes teatrales se ofrecerán en tres escenarios: Barakaldo Antzokia, el Museo Guggenheim y el Kafe Antzokia de Bilbao. “Estar a caballo entre dos sedes es muy importante para nosotros porque nos posibilita acercarnos a un mayor volumen de público y, además, tenemos tres escenarios muy importantes en los que mostrar las obras”, apunta Joseba Lazkano, director artístico de este festival que, en esta ocasión, contará con la presencia de compañías llegadas desde países como Hungría, Reino Unido, Bélgica o Corea del Sur.
Estos proyectos completan la cartelera del ACT junto a obras creadas en Euskadi, Catalunya y Madrid. “Vemos que ACT es cada vez un festival más reconocido entre las compañías. Además lo vemos, por ejemplo en el número de compañías de un país que realizan la solicitud para tomar parte en el festival después que otra compañía de ese lugar haya estado aquí”, explica Olatz Gorrotxategi, coordinadora del ACT. Y es que tras las 17 obras que se podrán ver a lo largo de este festival, hay un arduo proceso de selección de los montajes que tomarán alguno de los tres escenarios de esta cita que es un fijo en el calendario de eventos organizados por la escuela BAI de Barakaldo.
El tiempo pasa y este año se cumple la XV edición de una cita que nació en 2003 con el propósito de ser una ventana para que los nuevos valores del mundo del teatro muestren sus trabajos. “El hecho de cumplir quince años no hace que cada vez nos cueste más ofrecer una programación innovadora. No es difícil porque a este festival vienen compañías jóvenes y emergentes y eso es sinónimo de que tienen ideas innovadoras y rompedoras porque es algo que va en el propio espíritu de ser joven. Este festival es como un gran laboratorio en el que los propios creadores investigan y nosotros vemos los resultados de su investigación”, indica Lazkano.
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