El museo pretende acercar al público a la historia y cultura latina desde los comienzos de la inmigración de postguerra hasta la actualidad.
El «Sea Mar Museum of Chicano/a/Latino/a Culture», el primer museo dedicado a la comunidad latina de la costa noroeste de Estados Unidos, abrió sus puertas este jueves en Seattle con la presencia del gobernador del estado de Washington, Jay Inslee.
«Reconocemos el papel que desempeña el patrimonio y la cultura en la salud y el bienestar de las comunidades en todo el estado», dijo en un comunicado Rogelio Riojas, presidente del museo y director ejecutivo de la organización «Sea Mar Community Health Centers».
Riojas, de 69 años, aseguró que no existe un museo en el estado de Washington que cuente las historias de la comunidad latina y «sus importantes contribuciones pasadas, presentes y futuras». Este nuevo recinto servirá para este propósito, añadió.
El museo se ha construido con la ayuda del arquitecto José Bazán y los historiadores Jerry García y Erasmo Gamboa.
La organización Sea Mar, que provee servicios de salud y educación para la comunidad latina, pretende acercar al público la historia y cultura latina desde los comienzos de la inmigración de postguerra hasta la actualidad.
El objetivo del centro de 2.500 metros cuadrados es proporcionar una experiencia histórica que transmita orgullo en la comunidad latina y fomente la comprensión y el aprecio de la cultura latina a los visitantes.
La colección itinerante del museo exhibe objetos y tendencias artísticas para crear un legado histórico de la vida del latino en el noroeste del Pacífico.
El tema central gira en torno a los trabajadores agrícolas migrantes y el movimiento de derechos civiles entre 1950 y 1970, fase fundamental de progreso y empoderamiento para la comunidad latina en EE.UU, sin olvidar una sección relacionada con el asentamiento y evolución de la comunidad latina en el estado de Washington.Publicidad
Audios, documentos y fotos de inmigrantes mexicanos y de otros países latinos narran la historia social y económica de la sociedad hispanohablante en el estado de Washington desde la Segunda Guerra Mundial hasta la actualidad.
Los hijos de los trabajadores agrícolas que estudiaron para convertirse de adultos en luchadores sociales tienen su espacio propio en el museo, cuya entrada es gratuita.