Militó en el mítico grupo de Fela Kuti, Afica 70, y colaboró con músicos como Brian Eno, Paul Simonon y Damon Albarn, entre otros
El legendario batería y compositor nigeriano Tony Allen, uno de los creadores del estilo afrobeat, murió en París a los 79 años, según informó este viernes su representante, Eric Trosset, y recoge Efe. «¡Adiós Tony! Tus ojos vieron lo que la mayoría no podía ver. ¡Eres la persona más genial de la Tierra. Como tú solías decir, ‘no hay final», afirmó Trosset en su página de la red social Facebook a modo de tributo.
Allen murió el jueves en el Hospital Pompidou de la capital francesa, donde residía desde hacía años, por un súbito aneurisma, precisó Trosset a la cadena CNN. El artista estaba considerado, junto al cantautor nigeriano Fela Kuti, el creador del afrobeat, un género que mezcla música yoruba, jazz, funk y highlife y que fue muy popular en África en los años setenta. Kuti, que falleció en 1997, llegó a decir que, «sin Tony Allen, no habría afrobeat». No en vano, Allen fue desde 1969 a 1979 el batería de su mítica banda, Africa 70.
Nacido en la metrópolis nigeriana de Lagos, Allen, que empezó a tocar la batería a los 18 años como autodidacta mientras trabajaba como técnico en una emisora de radio de su ciudad natal, llegó a grabar más de una treintena de álbumes con Kuti y Africa 70. Algunas canciones solían durar más de diez minutos y sus letras eran a menudo diatribas contra la corrupción, los líderes autoritarios de África y los regímenes militares de Nigeria. Sin embargo, los dos genios se acabaron separando por discrepancias sobre dinero y derechos de autor y Allen dejó la banda en 1979 para marcharse a Londres e instalarse después en París.
El batería colaboró con músicos internacionales como Brian Eno, Damon Albarn (cantante de Blur y Gorillaz), Paul Simonon (bajista de The Clash) o Flea (bajista de Red Hot Chilli Peppers), entre otros. Brian Eno le llegó a definir como «quizás el mejor batería que nunca haya existido», un piropo que el artista nigeriano siempre encajó con humildad. «En todo caso estoy entre los mejores. Al fin y al cabo, llevo 48 años tocando el mismo instrumento y eso se debe de notar», matizó Allen en el 2009 en Logroño. La muerte del batería provocó numerosas reacciones de tristeza y homenaje, como la de Flea, quien dijo en su cuenta de la red social Twitter: «El épico Tony Allen, uno de los mejores bateristas que jamás haya caminado sobre esta tierra, nos ha dejado». La cantante beninesa Angelique Kidjo describió en Twitter a Allen como «un bello espíritu y amigo» que «cambió la historia de la música africana».