Llega a Madrid Van Gogh Alive, una experiencia multisensorial que combina 3.000 imágenes en movimiento, luz y música.
El viento sopla sobre los girasoles de Naturaleza Muerta (1888), las aves emprenden el vuelo en Trigal con cuervos (1890) y las constelaciones de Noche Estrellada (1889) dejan estela. Llega a Madrid Van Gogh Alive, una experiencia multisensorial que permite disfrutar de los detalles de las obras del artista holandés.
«Decimos experiencia porque huimos del concepto estático de la exposición. Aquí el espectador es libre, queremos que se siente, que se tumbe, que pasee y que se deje llevar. La experiencia está en la percepción que es diferente para cada uno», aseguró Elena Goroskova, representante de Nomad Art, a cargo del montaje. «Cada uno vive la experiencia de una forma. Los niños se divierten con los colores mientras que los adultos perciben la tristeza del artista y reviven la vida difícil, atormentada e infeliz de un genio que nunca se sintió comprendido», añade. Y todo, en 30 minutos.
Esta experiencia, que ha recorrido hasta el momento alrededor de 40 ciudades de todo el mundo, busca, más que presentar la obra de Van Gogh o incidir en su técnica, generar emoción en el visitante. La música adquiere un fuerte poder evocador y en unas pantallas gigantes se proyectan obras del artista holandés en movimiento. La tecnología SENSORY4TM combina 3.000 imágenes en movimiento y luz durante 33 minutos. «Queremos recalcar que esta experiencia no sustituye bajo ningún concepto la visita tradicional a un museo, pero es un primer paso. Queremos combatir las razones por las que la gente no va a los museos», explicó Elena Goroskova.
Además de este paseo por el legado pictórico de Van Gogh, el visitante puede aproximarse a su vida, sus miedos y sus obsesiones a través de fotografías, cartas, citas y a una réplica del dormitorio de Arlés. Ofrece también la oportunidad de examinar las fuentes de inspiración del artista en el prolífico periodo de trabajo comprendido entre los años 1880 y 1890.
La exposición cuenta con un espacio reservado para los niños y una sala de arte para aprender a pintar como Van Gogh con la ayuda de tutoriales en vídeo realizados por artistas expertos.
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